Tomada la decisión de comprar un rodillo, ya solo faltaba saber cual iba a ser. Existen básicamente dos tipo de rodillos: los tipo Turbo y los tipo Roller. Ambos tipos tienen ventajas y desventajas. Según lo que he podido confirmar, las diferencias serían las siguientes:
TURBO: Los rodillos tipo turbo son los que anclan el triángulo posterior de la bicicleta, de manera que esta queda fija, por lo que únicamente tienes que preocuparte de pedalear, sin prestar atención al equilibrio. Como pros, podemos decir que ofrecen un mayor nivel de resistencia, permitiendo trabajar a intensidades mas altas. En contra, pueden llegar a dañar el cuadro de carbono si realizamos determinados movimientos al estar anclados, y también diría que son bastante aburridos.
ROLLER: Los rodillos tipo roller están formados básicamente por un bastidor sobre el que se colocan entre 3 y 4 rodillos sobre los que se colocan las ruedas de la bici, previo ajuste a las medidas de esta. No fijan la bici en modo alguno, por lo que para mantenerte de pie debes pedalear al igual que lo haces en la calle o te caes, así de sencillo. Estos rodillos tienen la ventaja de ser mas divertidos y de mejorar la técnica de pedaleo sobre la bici, dado que aprendes a mover la parte superior lo menos posible y a aumentar su cadencia sin llegar a "saltar sobre el sillín". En contra, que la resistencia la pones tu con el desarrollo que pongas, sin olvidar el riesgo de caída (nada despreciable).
Yo me decidí por un tipo roller, y me compré el Arion, de Elite, un modelo basico de una marca de garantía. Lo compre donde siempre, en Wiggle, aunque esta vez no estuve acertado y más tarde lo he visto más barato en otras webs.
Mi experiencia con el rodillo después de dos sesiones con el es de satisfacción, aunque el comienzo no fue exactamente bueno. Me explico: la primera vez que me monté en el no tuve huevos de mantenerme encima mas de 1 minuto, me salía una y otra vez, llegando al extremo de plantearme deshacerme de el. Después de dos sesiones serias me encuentro más cómodo y se puede decir que ya le he pillado el tranquillo, controlando mucho mejor el equilibrio e incluso llegando a disfrutar. Confieso que cuando lo uso, llevo zapatillas de running por miedo a la caída, ya que una de las ocasiones me puse las zapas de ciclismo y sufrí una caída bastante aparatosa, aunque supongo que caerse en un rodillo de estos es algo lógico.
Mi Onix sobre el Arion. |
Vista del Arion plegado. |
Yo lo uso para trabajar principalmente el llano, pues puedes trabajar específicamente sin que nada ni nadie te moleste. Simplemente ajustas el desarrollo y la cadencia, o el pulso al que quieres trabajar y ala..aguanta ahí lo que quieras. Yo sinceramente creo que me va a venir muy bien para aguantar desarrollos potentes durante las carreras, algo que quería trabajar desde me hice con la Ordu. Aquí puedes ver una de mis sesiones, en las que he trabajado principalmente la cadencia, usando plato pequeño. Conclusion: Aunque el Arion y cualquier rodillo roller requieren de cierta adaptación, creo que no deja de ser una adquisición interesante, con la que se puede mejorar bastante la bici.
Espero que mi humilde experiencia os sirva a la hora de elegir.
Carpe Diem.
Gracias, tengo ganas de probar este modelo y viendo tu opinión creo que voy a hacerlo :D
ResponderEliminarGracias por tu aportación, estoy pensando en comprar uno de rulos y me sirve de orientación. Muchas gracias.
ResponderEliminarEduardo.
Hombre, el vecino tocapelotas será el produce la molestia, no el que la sufre y se queja por ello...
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